DESCUBREN QUE EL VIRUS DEL ZIKA ES CAPAZ DE FRENAR TUMORES

¿ES POSIBLE FRENAR TUMORES MEDIANTE UN VIRUS?

Unos científicos brasileños han descubierto que el virus del Zika puede ser utilizado como herramienta para frenar los tumores humanos agresivos en el sistema nervioso central, según un estudio publicado por el periódico científico "Cancer Research".

Este estudio se realizó por primera vez en un modelo vivo. Después de inyectar pequeñas cantidades del virus Zika en el encéfalo de ratones con tumores en estado avanzado, los científicos observaron una reducción significativa de la masa tumoral y un mayor tiempo de vida de los animales, incluso la eliminación completa del tumor y hasta de la metástasis en la médula espinal.

De los 29 ratones tratados, en 20 hubo una reducción del tumor y en siete la enfermedad desapareció completamente.

Los científicos utilizaron células cancerígenas humanas derivadas de dos tipos de tumores embrionarios del Sistema Nervioso Central: el meduloblastoma y el tumor teratoide rabdoide atípico, que afectan principalmente a niños de menos de cinco años.

Este virus no afectó a células tumorales indiscriminadamente. Es bastante específico para células tumorales del sistema nervioso. Para la realización de pruebas con humanos será necesario obtener el virus purificado en mayores cantidades y producirlo de acuerdo con buenas prácticas de cultivo.

Otro dato a destacar es que las partículas virales generadas en las células tumorales después de la infección se muestran defectuosas, lo que evitaría la expansión descontrolada del virus en el cuerpo del paciente.

¿QUÉ ES EL VIRUS DEL ZIKA?

El virus zika es causado por la picadura de un mosquito. El zika es similar al dengue, la fiebre amarilla, el virus del Nilo Occidental y la encefalitis japonesa. Se transmite tras la picadura de un mosquito del género aedes, como el Aedes Aegypti, que causa el dengue.

El tiempo de incubación suele oscilar entre 3 y 12 días. Tras este período, aparecen los síntomas. Sin embargo, la infección también puede presentarse de forma asintomática.

Generalmente, los síntomas duran entre cuatro y siete días, y pueden confundirse con los del dengue.

En los casos en los que las señales que revelan la enfermedad son moderados, la persona puede tener fiebre de menos de 39°C, dolor de cabeza, debilidad, dolor muscular y en las articulaciones, inflamación que suele concentrarse en manos y pies, conjuntivitis no purulenta y erupción en la piel, que tiende a comenzar en el rostro y luego se extiende por todo el cuerpo. Con menos frecuencia también se presentan vómitos, diarrea, dolor abdominal y falta de apetito.

Actualmente no hay una vacuna ni un tratamiento específico para el zika, sólo un manejo sintomático que consiste en descansar y en tomar acetaminofén o paracetamol para el control de la fiebre.